El próximo sábado 23 de marzo, Bolivia se enfrenta a un evento trascendental: el Censo de Población y Vivienda, una iniciativa vital para el país que busca recopilar datos precisos y actualizados sobre su demografía y condiciones de vivienda. El presidente Luis Arce hizo un llamado urgente a todos los ciudadanos para que participen activamente en este proceso crucial.
Con un notable incremento en el número de voluntarios censistas, que ha alcanzado la impresionante cifra de 845 mil, el presidente resaltó un incremento del 215% en comparación con el censo anterior. «El gobierno nacional está cumpliendo su palabra», afirmó el presidente Arce, subrayando el compromiso de llevar a cabo un censo exhaustivo y técnico que proporcione cifras confiables.
La envergadura de este censo se refleja en la enorme tarea que enfrentarán los censistas, quienes están programados para visitar 5,8 millones de viviendas en todo el país. Con un cuestionario expandido que consta de 59 preguntas, se espera que el proceso requiera más tiempo y esfuerzo que en ocasiones anteriores.
«Exhortar a la población a participar activamente es un compromiso que todos los bolivianos tenemos», enfatizó el presidente. «El país necesita la colaboración de cada individuo para garantizar la precisión de los datos recopilados, los cuales serán fundamentales para la planificación en todos los niveles del Estado», agregó.
Del 22 al 25 de marzo se implementará el auto de buen gobierno para resguardar la realización del censo, mientras que las actividades escolares se suspenderán el día anterior al proceso censal, reflejando la importancia y el impacto significativo de esta iniciativa en toda la nación.
