Buenos Aires, 9 de mayo de 2025.– Lo que comenzó como un presunto suicidio ha derivado en una investigación por homicidio tras la muerte del ciudadano boliviano Richard Flores Mercado, de 36 años, ocurrida el pasado 3 de mayo en la localidad de Ezpeleta, provincia de Buenos Aires. La comunidad boliviana, familiares y la embajada en Argentina exigen una investigación profunda, señalando que el hecho pudo estar motivado por racismo y xenofobia.
Según vecinos y testigos, el joven boliviano, oriundo de Arani (Cochabamba), habría tenido un incidente vehicular tras consumir bebidas alcohólicas con un amigo. Condujo unas cuadras y, al llegar a su domicilio, impactó levemente contra una verdulería. No hubo heridos, solo daños materiales menores.
Tras el choque, varios vecinos lo interceptaron y, en lugar de llamar a la Policía, lo golpearon brutalmente. Uno de los presuntos agresores sería un ex policía y propietario de una panadería cercana, quien habría liderado la agresión. Testigos aseguran que, ya en el suelo, Richard pidió que dejaran de golpearlo.
Una vecina del barrio relató: “Le dieron en el piso. Él decía que ya no le peguen. Todos lo vieron”. Varias personas presenciaron la escena y hay registros en video. Además, uno de los involucrados publicó en redes sociales un mensaje celebrando el ataque, acompañado de frases racistas y xenófobas.
Pese a que algunos medios locales difundieron que el cuerpo fue hallado colgado y sugirieron un suicidio, los testimonios y las imágenes en circulación contradicen esta versión. La familia del fallecido, con el respaldo de la comunidad, pide esclarecer los hechos y sancionar a los responsables.
La madre de Richard, una mujer de la tercera edad, viajó desde Bolivia para enterrarlo con la ayuda de los paisanos del barrio, ya que no cuenta con recursos económicos. La comunidad boliviana en Argentina ha iniciado una campaña de solidaridad y exige atención del consulado y autoridades diplomáticas.
“Si bien es cierto que Richard actuó de forma imprudente al conducir bajo los efectos del alcohol, eso no justifica una golpiza ni, mucho menos, su muerte. La justicia debe actuar con firmeza. El racismo también se castiga”, expresó un dirigente vecinal.
La Embajada de Bolivia en Argentina ya manifestó su preocupación por el caso y ha solicitado un informe oficial. Mientras tanto, la justicia argentina ha reabierto la causa bajo la figura de homicidio y no se descarta que se presenten cargos por motivaciones racistas.