Cochabamba, 5 de mayo de 2025.- El conflicto por el vertido de basura en terrenos al sur del municipio de Colcapirhua se agudizó este lunes, cuando vecinos, concejales y el alcalde Nelson Gallinate marcharon hasta la Gobernación de Cochabamba para exigir una intervención urgente, denunciando una amenaza ambiental y una imposición sin consulta previa.
“El bloqueo continúa. Están tres distritos movilizados. No hubo ninguna convocatoria por parte de la Gobernación, simplemente intentaron imponer el ingreso de basura”, denunció Gallinate, quien lidera el tercer día consecutivo de protestas en puntos clave como la avenida Blanco Galindo, El Reducto y la avenida Capitán Víctor Ustariz.
Las movilizaciones se intensificaron después de que la Empresa Municipal de Servicios de Aseo (EMSA) intentara ingresar residuos a una celda de emergencia supuestamente habilitada en un área fronteriza entre Cercado, Quillacollo y Colcapirhua. Según Gallinate, la instalación no cuenta con licencia ambiental, por lo que su funcionamiento sería ilegal.
“El terreno no es tripartito, pertenece a Quillacollo y Colcapirhua. Por ser propietario, no puedo recibir basura sin que se cumplan las normativas. Esta empresa firmó un contrato ilegal”, señaló el alcalde. Además, denunció que grupos de choque armados habrían atacado a dirigentes locales el pasado sábado, lo que ha incrementado la tensión en la zona.
Desde la Alcaldía de Cercado se ha restado importancia a las acusaciones, calificándolas de motivaciones políticas. Argumentaron que el espacio en disputa fue destinado como una solución temporal a la crisis de recolección de basura en Cochabamba, ciudad que genera más de 800 toneladas de residuos sólidos diariamente. Colcapirhua, en comparación, produce solo 36 toneladas cada 25 días.
“No se puede actuar por la fuerza, de noche y sin diálogo. Colcapirhua no quiere la basura del Cercado, y esa posición es firme. Exigimos respeto a nuestras normas y a nuestro territorio”, concluyó Gallinate, quien advirtió que las protestas continuarán hasta recibir una respuesta formal de la Gobernación.